El saco es típicamente un compuesto de dos capas: una capa interior de película PE única para contacto directo con el líquido, y una capa exterior de película laminada.Este laminado puede ser PET metálico para opacidad o transparente, dependiendo de las necesidades específicas del líquido que se empaque.
Los materiales de embalaje utilizados en las bolsas se seleccionan por sus propiedades de barrera, lo que garantiza una durabilidad y una experiencia a prueba de fugas.
En el espíritu de la administración ambiental, hay un creciente enfoque en la incorporación de materiales biodegradables y libres de BPA, lo que refleja un compromiso con la sostenibilidad.